- abril 13, 2023
- Natalia Araya
El rol de los gobiernos locales en la migración
La migración trae consigo muchos desafíos que son tan diversos como las personas que migran. Algunas situaciones requieren medidas a nivel nacional, pero otras se pueden abordar desde zonas más acotadas, entendiendo que las realidades locales tienen necesidades específicas. ¿Cuál es el rol de los gobiernos locales en este asunto? A continuación algunas claves y experiencias destacables de Chile, Argentina y Estados Unidos.
El Festival Hola América 2022 generó un espacio para conversar sobre el rol de los gobiernos en la migración, moderado por Alexis Torreblanca, coordinador de Infomigra, quien inició el espacio asegurando que las oficinas y gobiernos locales deben tener una mirada precisa y única frente a los desafíos y soluciones que enfrentan los grupos históricamente vulnerados.
Participaron en el panel Ingrid Robert, encargada de la oficina comunal de migrantes de la Municipalidad de Valparaíso; Daniel Valdez, director senior de asuntos externos en Welcoming International; Rodrigo Ceballos, director general de Relaciones Internacionales y Cooperación de la municipalidad de Córdoba (Argentina) y Rosario Olivares, subdirectora de Igualdad de género, diversidad sexual e inclusión de la Municipalidad de Santiago.
Sellos y verificaciones
Una iniciativa pública que impulsa la integración de personas en situación de movilidad es el Sello Migrante: un distintivo que entrega el Estado de Chile, mediante el Servicio Nacional de Migraciones, a municipalidades que trabajan en inclusión para la población migrante y refugiadas con estándares de calidad, enfocados en derechos y no discriminación.
La Municipalidad de Valparaíso cuenta con este sello. Ingrid Robert, representante de dicho municipio, asegura que desde 2017 ha buscado implementar políticas y estrategias para atender poblaciones determinadas como personas LGBTI+, poblaciones indígenas y personas migrantes.
En este proceso, dice Ingrid, han encontrado un rol clave en generar tejido comunitario y redes de apoyo con migrantes y locales. Universidades, organizaciones locales, nacionales y las mismas comunidades de migrantes se han organizado para generar espacios de diálogo y trabajo mancomunado para definir el camino de su Municipalidad.
Daniel Valdez aporta la mirada externa desde Estados Unidos: ha buscado espacios de diálogo para poblaciones migrantes y comunidades locales, y cree que los gobiernos deben garantizar la calidad de vida de todos, proveyendo instancias de intercambio de ideas y mejoras a los sistemas sociales y económicos.
La organización de Valdez certifica como comunidades welcoming a las que dan una bienvenida a las personas migrantes. Actualmente, 16 ciudades de Estados Unidos cuentan con esta certificación y planean llegar a 50 para 2025. Además, pretenden expandirse internacionalmente.
Otras consideraciones
Rodrigo Ceballos, en tanto, comenta que el protagonismo de las ciudades en el desarrollo de políticas públicas obedece a las necesidades particulares que tiene la comunidad en la urbe. Cuando se identifican estas necesidades, se puede diseñar un plan de gobierno que fortalezca la atención y un acompañamiento adecuado.
El apoyo que se brinda en Córdoba consiste en información clara y accesible de distintos procesos como regularización, capacitaciones para emprendedores, inclusión financiera y laboral, entre otros. Estas acciones, además, impulsan la interculturalidad a nivel social.
De vuelta en Chile, Rosario Olivares considera necesario el trabajo multidisciplinario para una convivencia sana, que resuelva desafíos particulares de distintas franjas de la población. Olivares propone abrir oficinas que se adapten a necesidades cambiantes y que puedan dirigir necesidades particulares de grupos diversos: mujeres, LGBTI+, niños y niñas, personas con enfermedades o discapacidades.
Por su experiencia en Santiago, Olivares considera que el Estado debe entender la complejidad de la migración y la multiplicidad de sus necesidades, y desde esa premisa, comprender que estas situaciones no se pueden resolver desde una sola oficina.
Desafíos pendientes
Los panelistas concordaron en el desafío que implica tomar acciones garantes para la comunidad migrante a nivel local que no sean bloqueadas ni limitadas por políticas a nivel nacional, como ocurre con la regularización de migrantes.
En ese sentido, creen necesario que exista claridad respecto a soluciones locales autónomas, con apoyo estatal, que se sean aplicables sin perjuicio de los cambios de administración de gobiernos locales y nacionales.
Por último, destacan la relevancia de abrir espacios de diálogo con la comunidad migrante para identificar sus necesidades, enfocándose en derechos humanos sin importar el estatus de regularización, y entendiendo que es un grupo humano tan diverso como son sus necesidades.